Y rebusque en mi pasado
una memoria perdida
un desentierro ocultado
en el cráter más profundo
donde yace la oscuridad
mi droga más preciada
y aún así
la más dolorosa de todas
no se en donde se ha escondido
por ocho largos meses
la palabra “amor”
que un día intercambiamos.
Decir que nunca ni hasta la fecha
desde hace ya casi dos años
la he dejado de amar
y hasta la fecha
jamás he parado de llorar
tan confundido me siento
en una eterna soledad
el haber navegado
por estas aguas viejas
del inmarcesible pasado
y a la vez tan presente
me hacen dudar
de lo que hoy tengo en mente
tengo miedo de volver
al tesoro que ese día enterré
solo me hago daño
pensando en el ayer
como si fuera algo nuevo
lo que hoy nuevamente encontré
me hace muy feliz
después de tanto tiempo
poder coincidir
en unas cuantas palabras
pero tenebrosamente con ellas
revivo mis fantasías soñadas
como si el reloj
empezará a correr al revés
me duele bastante
el simple hecho
de solo hablarte
y a la vez me llena de misterio
de ganas de más
de más y de más
volver a recaer en la misma droga
que no necesariamente es mala
pero tal vez hoy no es hora
tengo unas ganas de recrear todo
porque reconozco
que en su momento
me sentí como el ave blanca
recién liberada
de su pequeña jaula,
como el agua
cuando se desliza suavemente
por una inmensa cascada,
como el diamante
cuando fue encontrado
por alguna primera vez
simplemente; enamorado
por primera vez,
solo me hago daño
rebuscando mi pasado
solo me hago daño
platicando triste ilusionado
y aun así,
me gusta,
que es lo peor de todo
cuando sabes
que por más que hayas navegado
que por más que te hayas alejado
y por más que te hayas renegado
en la misma equis de antes
reposa el mismo gran tesoro
y eso,
es lo mejor
y lo peor
de todo.