Duermes, yo inquieto en infinita espera,
tú abandonada a la noche, me tiendes trampas,
me tientas
Recorro tu desnudez,
tu silueta de terciopelo invita
Los deseos aumentan
no consigo disimular las ganas
¡esclavitud de tu cuerpo!
Mis ojos indagan tu piel
como jauría desbocada
mis estatuas en busca de tus laberintos
¡me aferro a tus senos de miel y carne viva!
Me encarcelas... mis neuronas revueltas
ansían implacables tus lisonjas
Duermes a mi lado y yo enredad en tu regazo como hiedra
Me enciendes... soy insomnio que aguarda
tú hembra que desestabilizas
¡Despierta! mi nave está dispuesta
Soy ancla alzada
mástil infinito,
mi cuerpo trepida,
se enciende
Es que necesito germinarte con mi locura,
inocularte con mis relámpagos esta impaciencia.