Y el labrador va abriendo la tierra
canta la alondra en el barbecho
cae la semilla y se entierra
tiene que morir primero
para resucitar mañana
cae la lluvia en la besana
canta el labrador tras la yunta
las manos en el duro arado
va pisando los surcos
el cielo gris lo mira
hay un horizonte infinito
futuro pan para la mesa
amasado con sudor
del hierro de la reja
¡ Bendito el labrador !
que va abriendo la tierra
canta la alondra en el barbecho
la tarde se viste de seda
las mulas arreándo
con el yugo a cuestas
esclavas de la tierra
van llorando...
Y soñando con el pesebre
y la cuadra...
En su alma las espigas van brotando
cuando llegue la siega...