Gracias Dios, por darme la oportunidad
Que al abrir mis ojos pueda mirarla,
Contemplar su figura delicada cual niña,
Sus mejillas coloradas cual rosa,
Sus labios rojos cual carmín.
Gracias Dios, por darme la oportunidad
De poder tomar sus manos de amor,
De poder sentir su cuerpecito junto al mío,
De poder contarle historias sin fin,
De poder sacarle una sonrisa,
Gracias Dios, por darme la oportunidad
De ser una luz en su camino,
De ser una fuerza para su lucha,
De poder abrigarle una esperanza,
De ser la hija de sus sueños.