argantonio

Música para el dolor y el amor

Las grandes obras musicales

fueron encargadas por monarcas

pagaban con monedas de sus arcas

todos los grandes fastos reales.

 

Enrique VIII con ánimo de seducir

a futuras reinas encargaba para sus esponsales

deliciosos madrigales, augurios de funerales

músicos y poetas tenían con que vivir.

 

Se nos viene a la memoria

las cantígas del rey Alfonso

en loor de la vírgen María.

 

Tuvo en el amor a las letras su gloria

nunca su música sonó a responso

y de iglesias y plazas fue musical alegría.