MIGRANTES
Muchos, y de diversas formas han marchado,
Con lo poco que les queda de sus miserias,
Y lo mucho que pueda caber en sus bolsillos.
Así caminan día tras día, bajo el sol o el frío,
Interminables días de hambre y sufrimiento.
En el camino contarán cada uno sus penas,
Los amores que en su país dejaron, su familia
Aquello a lo que renunciaron, sus trabajos,
Sus casas, sus cosas, todo por lo que lucharon,
Años de penurias y sacrificios invertidos
Para hacer un mundo mejor para sus hijos…
Dios los bendiga, valientes migrantes,
Dejando todo atrás, hasta sus querencias,
Pero jamás las ganas de un mundo mejor soñar…