Culpable de mi dolor
Tu mí
“Rayo de luna”
Tangible en mis sueños
Espejismo en la luz tú,
Mi ladrón dulce galán, víbora mortal
Tu, brujo de mi corazón
Con esa son risa picara y esa mirada infantil
Una loca irreversible hiciste
De mí.
¡Déjame! Ya más no puedo
Todo me has quitado
Cuerpo y alma te entregue más no me pidas
Pues lo único que me queda
En la vida que muy gustosamente
Te entregaría porque si no estás junto a mí.
¡Valdrá la pena seguir!
Lo único que me anima a vivir es
Esa mañana, que siempre
Te esperare, incluso después de
Morir.