No soy la mitad que fui y ahora no soy el entero que seré,
soy el accidente improvisado de sendero,
soy soma perecedero,
soy peón, rey, soy el reino.
Disyuntivas de parajes lejanos,
te cortan la tregua de lo añorado,
indulgentes caminos de empedrados,
de pasto y en ocaciones de asfalto.
Pareciera que la vida es invento del loco,
trastornos que traen facetas en el tiempo,
lobotomia que aveces es necesario,
recaída que te expone tu falta,
felicidad lejana hecha de hilo en oro,
mi torso en camisa de fuerza
no la alcanza y aveces no la suelta.
Todo está dentro y nada afuera,
somos un microcosmos de emociones
de nube húmeda y mente en salmuera,
somos producto del pasado azaroso,
del tropiezo que al levantarse enseña,
somos la interminable luz de sol
y también el efímero brillo de vela.
Somos y eso es lo que hoy cuenta...