Si yo fuera un dios todopoderoso
creador de la noche y el día,
habría hecho un universo
con mucho más poesía...
Si yo fuera un dios padre amoroso,
creador y amante de todos mis hijos,
no les permitiría ningún sufrimiento,
caso contrario, amoroso sería un sufijo...
Si yo fuera el dios único y verdadero,
amo y dueño de toda la creación,
no habría tantos templos como credos,
porque yo sería la única religión...
Si yo fuera un dios omnisciente,
dueño del tiempo y el destino,
habría hecho más mundos como éste
en los que todos fueran cercanos vecinos...
Si yo fuera un dios omnipotente
no permitiría que simples humanos,
abusaran de los niños inocentes
y en mi nombre lavarse las manos...
Si en verdad un dios existiese
le haría muchas preguntas,
que por favor me dijese,
dónde van las almas vagabundas...
Si me pudiera responder,
siendo él mi padre y yo su hijo,
cómo has podido permitir
en mi vida tanto castigo...
Tantas interrogantes viajando conmigo,
tantos creyentes que has perdido,
muchos haciéndose rico contigo
y cada día te quedan menos amigos...
Todo lo anterior me lleva a una conclusión,
después de tanto desastre y mentira,
siempre fuiste una gran ficción,
pero esa verdad jamás será escrita...