De rama la vieja escoba
Las riendas por un cordel
un pequeño oropel
corría su mundo caoba.
Llevaba en su pensamiento
glorias de gladiador
para vencer mejor
quedando sin resentimiento.
Cuanta miseria veía
sin creer en la nobleza
el chico en su cabeza
enfrentarla si podía.
Él ganaría el duelo
junto a su perro aluvión
ha de ser su devoción
la justicia en este suelo.
Mírame Cristo del cielo
dame fuerzas suficiente
para proteger a tu gente
y darles alas para su vuelo.
Ya que creo en este sueño
hacer del mundo un agrado
que el río sin ser sagrado
viaja sin tener dueño.
Mi escudo será la paz
para ganar la batalla
mientras la maldad estalla
entiendan a este rapaz.