La huella lo deja el que aprendió tocar la piel y el alma al mismo tiempo.
Un beso fuerte y delicado
Como un compás perfecto,
Un tacto inesperado
En el lugar correcto.
El día se olvida
Pero nunca el lugar.
Hay manos que dejan cicatrices,
Heridas abiertas no suturadas,
Quema el alma, su veneno,
Quema la piel, su infierno.
Hay besos que pintan de amores,
Tatuajes de hermosos colores,
Un corazón o una mariposa,
Una corchea, o pétalo de rosa.
Un toque fuerte y delicado,
Que hace sudar la piel,
Que hace gritar muy alto,
Pero no de dolor sino de placer.
La fecha se olvida,
Pero el momento, no.
La huella lo deja el que aprendió
Tocar la piel y alma al mismo tiempo.
Autor: Alex de jesús