Quizás..son unas de las personas que considero más valientes,
son los que las empresas casi nunca valoran,
porque siempre ahí están, casi nunca se quejan, a no ser de actuaciones flagrantes,
son los buenos hijos- hijas, los buenos maridos, los buenos hermanos, los buenos padres.
El tonto útil simplemente tiene conciencia,
y en el trabajo cumple, como mínimo hará más de lo que debe,
y en el resto de su vida también,
son en el fondo pilares en todos sus grupos sociales.
Los tontos útiles suelen ser así tratados,
por los sinvergüenzas y los..en el fondo inútiles,
Que están acostumbrados a ganar y vender todo lo que hacen,
un rasgo clarísimo de tonto útil o tonta útil que casi nunca está sólo, siempre alguien le reclama.
El tonto útil luego se le necesita,
cuando hay urgencias en las empresas,
pero no se acuerdan de él en las mejoras,
quizá como no se queja, en las dádivas.
Sin embargo, los tontos útiles suelen ser muchísimo más felices,
porque están integrados en sus entornos sociales y laborales,
no están obsesionados con ascensos ni en qué los quieran ni valoren,
son los engranajes, las piezas básicas de cualquier sistema,
porque además suelen aprender solos,
y son poliflexibles y multitarea.
Los tontos útiles..sin duda son los mejores jefes,
porque su autocrítica les hace humanos,
y su conocimiento les hace a veces humildes trabajadores,
Que con su ejemplo dignifican la labor del empleado.
Ojalá hubiera en España más tontos útiles,
y menos especialistas de mierda,
listillos claramente inútiles,
Que encima siempre se están quejando de su mala suerte y de injusticia.