Cuando pienses que todo ha terminado,
cuando tus sueños no se hayan acabado,
recuerda tú lo mucho, que te he amado,
y todas las noches, que yo te he llorado.
Yo sé que te marchaste una tarde,
sin pensar en mí, ni en mi sufrimiento,
mis noches eran días y aún me arde,
aquellos besos, que están en mi pensamiento.
Nuestro amor fue fugaz, como aquella estrella,
que viaja tan ligero en el firmamento,
no puedo negarlo que eres tan bella,
que sigues viviendo en mi pensamiento.
Yo sé que es imposible, pedirte que me ames,
que llenes mis vacíos con todos tus sosiegos,
sé que no eres feliz, pero ya no me llames,
porque tu amor a causado en mi muchos estragos
Hoy tus tardes son frías, sin mi abrigo,
pues el amor que tuvimos ha terminado,
yo pienso que no debo ser tu amigo,
porque tu presencia ya me ha castigado.
Yo creo que es mejor vivir así, algo distante,
pues tú vas empezando un sueño y yo un amanecer,
yo no puedo ser tu amigo, ni tampoco tu amante,
porque hace rato, tú, ya me enseñaste a perder.