Un día cualquiera te das cuenta que tu ser es como una flor,
Que cada experiencia nueva es un pétalo que nace
Y cada experiencia sumada al pasado, es el pétalo que debía caer,
Que su ciclo natural es el mismo que tú experimentas,
Día a día naces, creces, floreces y mueres,
Mueren tus decepciones, mueren las desilusiones,
Mueren las promesas no cumplidas, mueren las falsas expectativas,
Sin embargo, para morir, primero te queda nacer, crecer y florecer.
Entonces comprendes que necesitas de otros factores para llegar a ser magia,
Un buen abono, tierra y agua,
El abono y la tierra se convierten en la base como la familia en cada etapa,
Y el agua tan vital como el amor...
Amor que llega y te ayuda a crecer,
Amor constante, amor valiente,
Amor combativo, amor rebelde,
Amor desinteresado,
Amor verdadero que te invita a ser más fuerte.
Un amor que en cada proceso te quiera observar porque al fin y al cabo...
No cualquiera merece verte florecer.
Tatiana Contreras