FRÁGIL Y DEMENTE
Ahora sólo queda pedirte que me perdones
Por dejarte así marchar…Por eso que hice ayer,
Por lo que haya dejado en algún momento de hacer,
Por no haber dicho que no, por mis acciones…
Acepto que muchas veces me equivoqué,
Separarnos no fue, ni era nuestro destino.
Tomamos conscientes, diferentes caminos,
No entiendo porque en ningún lo cuestioné.
Y ahora entre nosotros este mar silente,
Que me ahoga… y por eso ahora te escribo,
Para decirte que sólo por ti es que vivo…
En este mundo, frágil y demente…