Es asombrosa la habilidad que te hace permanecer en cualquier lugar, a pesar de que no estés ahí.
Tu inconfundible perfume frutal, te delata para hacerme saber que has estado muy cerca de mí.
Sé que eres la chica de el antifaz, también me he dado cuenta que sueles espiarme cuando tomo café.
Ya no es necesario que des más vueltas por el jardín, acércate y date cuenta que estoy levitando de amor por ti.
Tomas tu tiempo y sabes esperar, intentas amar, el plan sin duda es triunfal, pues me he enamorado.
Qué más da, podría esperar un tiempo e intentar ser paciente, pues merece la pena estar al lado tuyo.
Esto es destino, no casualidad. Sería absurdo no confiar en que eres la otra mitad que nació para mí.
De las almas gemelas quisiera hablar, ahora que encontré un conexión venidera de lo profundo, en tus sentimientos.
Esto es destino, no casualidad, lo sé ahora que me he enamorado...