Yo no quise ser como tus mujeres,
porque yo no soy de tu montón.
Y por más que me llenes de placeres,
tengo que luchar contra mi corazón.
Porque yo soy más mujer
y a ti te gustan las niñas.
Porque tienes miedo a que pueda yo
valerme por mí misma.
Porque a ti te gusta cuidar y proteger,
y a mí me protege mi instinto,
mi filosofía y mi saber.
Porque te gustan las mimadas,
las que andan con el corazón roto,
más yo ando con la frente en alto
y el corazón entre yesos y yodo.
Porque a ti te gustan las fiestas,
la bebida y su mujer,
y a mí me gusta la lluvia,
un buen libro y la música del ayer.
Que de todas no sea la más bella,
eso yo lo sé,
pero entre las flores del campo
me suelo desaparecer.
Y me comparo con las rosas,
los claveles y tulipanes.
No soy enemiga de todas,
más soy amante de sus paisajes.
Tus mujeres son de la calle,
las que el barrio ha de conocer.
Yo soy mujer de mis paredes,
de mis poemas, de mi ser.
Yo soy mujer de todos,
mujer que nadie ha tenido.
Soy mujer de pocos,
y como tú, nadie me ha querido.