Una desolada tarde
Añorando tu presencia
Recuerdo como llegó a mis días
La condena de tu ausencia
En el juego diario de la vida
Apareció de forma inesperada
Una figura femenina muy traviesa
Derrochando sensualidad y belleza
Prometiendo frenéticos placeres
Despertando tu frágil naturaleza
De inmediato te sentiste atraído
Y a mi…..me mandaste al olvido
“Son solo fantasías”…. Dijiste
Pero ese día tú elegiste
Aceptar la invitación comunitaria
Sin pensar que te dejaría como a un paria
Riéndose de ti y tus plegarias
Hombres necios cuando aprenderán
Que el sexo no lo es todo en el amar
Que por no saber controlar sus instintos viriles
Se quedaron igual que los gentiles
And y vé muñeca hermosa
Sigue tu eterno juego de incitación
A todos prometes con tu cuerpo el paraíso
Para burlarte después del resultado de tu hechizo
Pero recuerda que la vida se pasa como una canción
Y al final te queda solo lo que llevas en el corazón
Manejas bien el arte de la seducción
Olvidaste que Dios nos dio a las mujeres ese poder
Para así a su pareja complacer
Ruego a Dios mi niña
Que te aleje de esa quimera
Y que para ti la vida deje de ser tan lastimera
Que reconozcas el verdadero valor de las cosas
Y que dejes salir la auténtica hermosura de tu rosa