ANSIEDAD
Ni una palabra, ni un te quiero,
En eso se convirtió tu vida y la mía.
Ni un te extraño, ni un “aún te espero”,
En esta relación distante y fría…
Y así pasan las horas, muchos días,
Y el reloj corre, pausado, lentamente,
Deseando que me ames, vida mía,
Solo tú sabes que pasa por tu mente.
Algunos preguntan, si hemos terminado,
Lo mismo reflexiono, en la soledad…
Solo sé, que mucho te he extrañado,
Y cada día es más grande, esta ciudad.
Y de todos modos, aún ansioso espero,
Un mensaje, una foto, una llamada,
Y poco a poco, cada día muero,
Por saber un poco de ti, mi amada.