Era de noche y estaba oscuro..
dormitaba entre sueños adultos
y de pronto presentí... adusto
el mirar de un ángel y sus murmullos.
Yo le miraba, mudo y perplejo
mientras él me hablaba desde su adentro
me narraba una historia de sufrimiento
sus palabras llevaban algo siniestro.
Cuando al fin reaccioné a sus envites
le detuve y le dije: ¿por que me oprimes?
¿Por que me acongojas si no hago mal a nadie?
Me contesta: es el modo en el que vives
causándole daño a tu propia psique...
más vale que pares y que claudiques.
...
Frustración contenida... ángel sin alas
no soy más que yo mismo entre las salas
de mi mente dolida, tal vez macabra
que en mis sueños presenta su fea cara.