Hoy recuerdo lo que fui y no podre volver a ser;
Yo fui risa, yo fui canto
y la Briza tempestuosa que en el campo
correteaba a mis amigos que huían
del encanto imaginario del hechicero cruel,
fui pirata conocido, bandolero muy temido
y de un ejército bizantino “coronel”,
fui sonrisa veraniega, fui destello de esperanza,
fui una nube pasajera que ligera se ha quedado en lontananza
a la espera de lo que será mi nuevo ser,
y al crecer, conocí mujeres bellas
y fui don Juan de muchas de ellas,
fui una intensa llamarada en su regazo
y amor constante que al ocaso
las montaba en las estrellas y veía su alma florecer,
fui pasión errante, fui deseo febril,
hice del amar un arte y con mis besos un jardín,
fui artilugio del consuelo, consejero en el amor,
como amigo el más sincero,
y como compañero noble fui el mejor,
pasa el tiempo y lo que soy no es ya tan importante
pues tan solo es un instante
que se pierde en el fulgor del nuevo día que esta entrante
y el mañana empieza hoy,
me doy cuenta que el futuro es incierto
y lo único que puedo hacer
es disfrutar la vida en el momento
pues tendré que perecer
y a partir de ese instante
para siempre en lo distante
solo ausencia he de ser.