Claudio Batisti

La vida (soneto)

 

Misteriosa y sutil desaparece

la irresistible dama clamorosa,

que la palabra queda temblorosa

si sale de sus labios y florece.

 

Ella se va, sintiendo que amanece,

con la virtud, de un alba esplendorosa

parece que en el cielo es una diosa

y el edén en la tierra se estremece.

 

Se muestra complaciente a quien la mira,

y brinda con sus ojos la dulzura,

que puede imaginar aquel que admira;

 

es tan angelical, paloma zura,

que mi espíritu cálido suspira, 

y va diciendo al alma.- ¡Que locura!

 

Claudio Batisti