El viento corre sobre el asfalto
Se lleva lo que pase por su camino
Arrastra y envuelve el polvo
Lo miro, con mi vidrio empañado
¡Oh Dios!, grita una voz desde el fondo
Mi mente me traiciona
¿Es mi mente?
El beso de traición
La caricia del dulce Judas
Un suave susurro del dolor
Lo que una vez fue,
Sucedió
Y no volverá a ser
Las cenizas no se alzarán
No arderán
El amor que alguna vez hubo
Renegado de calidez será
El hielo arde desde su interior
Como gasolina encendida recorriendo nuestro espacio
Pero nuestros ojos y mente se niegan
El infierno se desató
Y nos quemaremos en este limbo de dolor.