¡Te amo! Desde esta mi esquina
Ajena al mundo y ajena a mi...
No conozco la libertad;
mis horas y espacios no me pertenecen,
y aún así callada y meditabunda me encuentro amándote desde esta mi esquina.
Te mentiria, si te digo que visióno una eternidad o la vejez a tu lado... Para mí solo existe el ahora
El tiempo me enseño que nada está escrito
Y que el destino de burla de nuestros planes,
Pero desde este mi rincon, te miro y
quisiera sustraerte cualquier asomo de ternura
Ella es la culpable de tu magnetismo...
Desde este mi rincón te estoy amando.
Si me hayas retraída, adsorta en mi mundo de alabanzas,
no sientas pena por mi.... allí soy feliz, allí soy libre,
Conviviendo con mis locuras y los recuerdos de tu mirada.
Allí en ese mi rincón, a mi manera, soy feliz.