ANESTESIADO

DIGNA RENDICION

Hoy te esperé

con la misma impaciencia,

el latir acelerado

la respiración agitada...

 

Hoy me miraste

con la misma dulzura,

con los ojos brillosos

clamando una oportunidad...

 

¿Quién cederá primero?

si ambos como niños

nos escudamos en indiferencia,

nos alejamos por evitar

otro momento de desilusión...

 

Tal vez nunca cedamos,

¿es este juego eterno?

¿acaso así es más interesante?

si cediendo pierdo el juego

¡entonces quiero perder cediendo!

si es la única manera

de acercarme a ti,

esa pérdida será en realidad

¡una victoria!