Dios le puso,
nombre a cada una de las estrellas,
pensando en ti,
el abismo entre nos,
la distancia de tu boca y la mía.
El desierto de nuestras pieles en el mar de los roces,
esperando el más perfecta de las caricias,
el silencio de las voces da
paso a un encuentro intenso de pasión retenida.
Eva Estella Parejas manzanal