Poeta del Silencio

INDULGENCIA

Quebré tus alas descendiendo a la miseria, 

herida por el viento de mis palabras vanas e imprecisas,

ahora siento morir tras caídas y rutinas sin sentido,

libérame del suplicio y abraza mi clemencia,

como arroyos ausentes de cauces entre colinas,

siente mi alma sola áridez y frío invierno de lágrimas.

 

Regresa a mi calma y revive en tu memoria

el recuerdo miel que fuí entre risas e instantes serenos,

me hallo entre tanto vacío infinito de dolores,

tu que llenas el nocturno celeste con tus cristales de estrellas,

ilumina mi extenso camino intermitente entre escombros y ruinas, 

dale vida a mi existir aunque te sientas herida.

 

Una palabra tan solo el pensamiento extenso 

para decirte perdóname, muero si te pierdo,

vivo si me hallo contigo, dentro del alma tuya,

insistente en estos versos que solo expresan lamento,

lamentos inquietos y agitados que llueven de mis labios,

hablo con el pensamiento pero siento con tu sufrimiento.

 

Vuelve a vestir de realidad el sueño que inventamos,

no marchitemos las rosas que hicimos crecer,

hablemos de nuevo como soñando inspirados,

que el tiempo transcurra mientras vivamos soñando,

ámame de nuevo como si fuera tu principio,

te sigo amando porque vivir contigo es mejor que soñar dormido.