tienes un corazòn frìo, de piedra,
sostenido por una casa de tarjetas, que caerà pronto,
tienes la conjetura exacta de una mesura,
cayendo tan bajo, que tocaste fondo.
desearìa mirarte con otros ojos, no con estos,
desearìa no haberte besado con estos labios,
sentir en el real mis pesadillas,
¡oh! cariño yo seria tu anteguerra.
maldiciòn maldita, la que me haz dejado,
esta que se trepa como rama en mi corazòn quebrado,
que me hace verte con amor e inocencia,
en un cuerpo donde solo hay muerte y miseria.
maldiciòn maldita, de esta bestia que siento,
que hace que mi verso sea tonto e incoherente,
que me devora la carne de estas manos,
que me oscurece la mente para solo verte.
este ocaso sin prestigio en el que me has dejado,
en este cielo que no me observa, pero siento,
de amarte en la amargura de mi tristeza,
y del deseo de tu maldiciòn extensa.