Dios no hizo que hablemos,
él no hizo que nos toquemos,
Dios hizo que nos miremos y que suframos al no tenernos.
Hay besos que se dan con la mirada,
hay amores que se dan solo en sueños,
hay caricias que solo sienten las almas, y yo sigo contemplándote a lo lejos.
Irónico es haber terminado antes de empezar,
como palabras sin destino,
como un perdón sin cometido y tu amor que aún no eh perdido.
Odio la hipocresía,
hipócrita es mi amor,
digo que no te amo y sufro porque te quiero.
Guardo tus recuerdos en pedazos de mi alma,
brillas por tu ausencia e ignoras mi existencia.
Llenas el vacío que existe en mi mente,
el tiempo no es largo y no quiero perderte.
Sé que ya es muy tarde,
quizá ya eh perdido,
aunque me es confuso saber si me has querido...
Los destinos se cruzan,
las miradas también,
tu mirada y la mía especial es.
Tantas estrellas incluidas la mía,
te cega la luna y ya no eres mía.
Confieso que te amo alejado a la luz,
te miro de lejos longevo mi amor,
sigues el camino que alguien te dejó,
te mereces todo menos mi amor.