Me acostumbre
a que me narren cuentos
donde casi todos los finales
se vencía.
Me acostumbre
a que me narren historias
Tristes, sin un final
Y me acostumbraron a
Mirar las estrellas y comparar
la vida con una de ellas.
Yo ilusa comense a recorrer
y tropezar,y el dolor y frustración
me hicieron entender
que puede no hallan finales felices,
ni desgracia tan grande ,
que dure toda una vida.
Y que todo gira y cambia
con un solo motor ,el amor