¡Mi Madrid! ¡Madrid en mi corazón sincero!
Yo no te engaño, si despierto, te sueño
en tierra, acaricio tu cielo madrileño
o tu sonrisa me lleva a tu velero.
Estoy en ti, te saludo en mi sola compañía,
pero no estoy solo, si te tengo a mi lado,
porque aunque te hablo, estoy callado,
y cuando estoy callado en ti encuentro melodía.
Dios quiera poder seguir tu estela,
(la necesito) para mi corazón con candela
tus ojos de fuego me den ternura.
Si no te sueño o en ti no estoy impreso:
¡cuán miserable me sentiré sin tu beso
o tu compañía que abrace mi cintura!
Febrero 2.018
NACHO REY