Aparece en todas partes de mi casa,
me busca a donde vaya,
me visita muy constantemente,
muchas veces duerme conmigo y la encuentro
hasta en mi mente,
me acompaña la mayoria del tiempo
y trae consigo a alguno de sus amigos,
se mete en mi corazon
hasta encontrar mi desesperacion,
se sienta a mi lado y me habla al oido
recordandome que esta conmigo y que no se ha ido.
Cuando llega la alegria se aleja
pero siempre me vigila
para ver en que momento me aniquila,
siempre aprovecha una oportunidad
para acabar con mi tranquilidad,
ella, mi eterna compañia
la soledad, la compañera que en mis horas
tristes nunca me abandona.