Destilaré mi savia, por consejos
del escritor mayor en esta tierra.
Si bien de sus sonetos yo estoy lejos
también lo están mis ojos de Inglaterra.
El que ante mi osadía estén perplejos
comprendo, más no es algo que me aterra.
Acumulan mis años los reflejos
para lidiar con ellos esta guerra.
No dejaré la vida a los gusanos
bien dicen los escritos de sus manos
no solo los sonetos, todo es copia.
La muerte nada puede ante la vida
si toma otro su posta en la partida
manteniendo su esencia, como propia.