Entre las grietas del sueño,
se ocultan las realidades.
Deseos insatisfechos.
Proyectos sin resolver,
o anhelos que se deshacen,
como pompas de jabón.
En las sutiles fisuras,
que quedan en la experiencia.
Se debaten los errores,
que reclama la conciencia.
Y su frágil apariencia,
deja lívidos temores.
Sorpresas al despertar,
después de asumir la culpa.
Cual la justicia que indulta,
al reo en su realidad.
Dando forma a la verdad,
que la libertad exculpa.
El amor quedó dormido,
en el cómodo regazo.
Seguro que algunos ojos,
vigilan su despertar.
Ajeno a la realidad,
que amenaza su reposo.
Así suspiro a suspiro,
va transitando la vida.
Derramando gota a gota,
el poder de su latido.
Golpe a golpe en su delirio,
va esculpiendo la partida.
Soñadores de aluvión.
Que inundan los corazones.
Forjadores de ilusión,
que liberan las tensiones,
que oprimen al corazón.
Hacedores de emociones.
Presa en la gruta perdida,
de los arcanos ancestros.
Vive la auténtica vida,
sumergida entre sus restos.
Cual criatura hibernando,
a la realidad dormida.
Como una balsa flotando,
en un mar de aguas tranquilas.
La razón se va acunando,
con la verdad reprimida.
Esperando los vaivenes,
de corrientes imprevistas.
Roza la voz sin tapujos,
la verdad que se macera.
Despertando a la razón,
que se encuentra prisionera,
de su propia cerrazón.
Así el Hombre se libera.
Oropeles y reliquias,
que adornan la falsedad.
Con elegantes mantillas,
que tapan la fealdad.
Brocados de fina seda,
encubriendo la maldad.
Las grietas se irán tapando,
cuando en argamasa tornen,
el respeto y la verdad.
En simbiosis con la idea,
que engorde la humanidad.
Sin perderse en la quimera.
A.L.
http://alupego.blogspot.es
14/12/2018