¿ Quien más que el dueño del más grande dolor puede saber cuanto soy capaz de soportar el propio ?
¿ Quien si no ha padecido el desprecio y el abandono del que ama siente como es la lejanía ?
¿ Quien si no ha sufrido al máximo la pena de la vergüenza y el mal trato del que ignora todo ?
¿ Quien es el maestro de maestros en enseñar que por medio de la soledad, del dolor, del sufrimiento, el abandono y demás es como se salva el alma ?
¡ El ! Con su sufrimiento en esa cruz me dio el valor, la fortaleza, la entereza de saber que solamente así, con Él si soy feliz, solo por amarlo, por seguirlo, por imitarlo, por oírle la enseñanza y sobretodo a saber que de Su mano un día iré al lugar en donde habita Él.
J. X. A.