Victor Morales Rodriguez

ORGULLO

     Si un lucero de la noche,

de su luz te quiere dar;

y le haces un reproche,

es que... no quieres amar.

 

     Si al estar ante una rosa,

tú, no logras exclamar;

y decir, ¡cuan es hermosa!

es que... no sabes amar.

 

     Si el color azul del cielo

lo confundes con el mar;

no valoras un lucero,

ni una rosa, ni la mar.

 

     Más, si borras ese orgullo

el de no querer amar;

amaras hasta un capullo,

cuando lo veas en el rosal.

 

     Y si escoges un lucero,

seguro estoy, que lo amaras;

 para ti será el primero,

y el que entre todos brille más.

 

     Y en el amor, veras un cielo, 

y, una gloria en el amar;

y creerás estar  en vuelo

por ese cielo... y sobre el mar.