EL RODAR DE LOS DADOS
Han tirado los dados
con un sonido hueco y sempiterno
entre gritos gastados
perdidos por rincones del invierno
Un anciano con tino
de perchas despolvò viejo sombrero
y alzò copa de vino
diciendo al camarero
Son dos dados que aviento
que ruedan... ruedan desde que yo existo
y vienen del àrbol del sufrimiento
uno, àrbol de Judas, colgamiento
y el àrbol otro, cruz de Jesucristo
Los dos dados, insisto
ruedan con el gastado igual madero
porque sin Judas, no existiera un Cristo
Y sin Cristo, ni un Judas traicionero
Beatriz Vicentelo
Carlita 161