Hazte amigo de las aves,
de las plantas y de cuantos
animales pueblan la tierra,
aprende a conversar con el viento,
con el sol y cuanto astro
exista en el universo.
Dialoga en la soledad
con tu propio ser
e imagínate con fuerzas
que vives en otro mundo,
porque así es...,
y descúbrete, porque esto será desde ahora
el más intenso deseo que crecerá
día tras día en tu mente,
para tu propio bien y gozo eterno.
Juan/Rubens