A veces mis letras bien suelen amarte,
aunque no me mate por hacerlo así.
Así no tuviera intención de halagarte,
o aunque no te busque, me eliges a mí.
En esos momentos me revalorizas:
que todo lo puedo, no hay nadie mejor.
Y vos la más dulce de todas las reinas,
la que me encandila, regalo de Dios.
Y vienes y escapas como la marea:
somos uno o nada, según cómo estás.
Tal vez sean solo fantasmas que me hago
Jugándome entero a que me vas a amar.
A veces te lleva un profundo silencio
y me clavás vistos, si es que acaso ves.
Quedas conectada pero sin respuesta,
quién sabe en qué mundo, lejos de mi ser.
Es entonces cuando te me desvaneces;
yo que me disuelvo, me muero de amor.
Y desaparezco de todos tus muros,
pero escribo versos para estar con vos.
Y me escapo y vuelvo como la marea:
somos uno o nada, según cómo estoy.
Tal vez sean solo fantasmas que me hago
perdiendo mi apuesta...al menos por hoy.
Edu Fantini