Nestor Varela

Selfie

 

Distante eres tanto

como las preocupaciones y el trabajo te pueden tener,

estás sin estarlo, al mismo tiempo,

sobre el frenesí citadino,

lleno de formalismos,

de acuerdos ciegos,

alienado bajo el fuerte látigo de un segundero,

tras el embeleco del poder o del tener,

creyéndote algo más que un grano de polvo cósmico,

sí, un sucio grano que puede más que los demás,

o al menos, eso te gusta creer;

y estás sin estarlo,

al mismo tiempo,

frente a mí,

absorto en tu móvil,

lleno de lucecitas,

de sonidos dormitantes,

de información graciosa,

inútil o angustiante,

saltando de un estado de ánimo al otro,

en un segundo,

a cada látigo,

perdido entre basura mediática,

perdiéndote de ti,

buscando a través

de otros la aprobación,

la gracia, la sonrisa,

tan desesperadamente,

creyendo validar así

ese pequeño,

tu pequeño yo.