I
Encomiendo a ti mi destino
Amado y eterno salvador
Porque en ti resguardo mi existencia
Tú eres y serás la grata esencia
Que fortalece y nutre mi alma
Dándome completa calma
Cuando la tormenta toca a mi puerta
Y sé que pronto la tempestad de mí se alejara
Porque tengo la fe y la certeza
Que tú estarás conmigo
Porque tu manto divino
Me cubre, me guía y me protege
Durante el largo camino
Me aleja día a día de todo peligro
Y de los engaños del maligno
Que a mi quiera dañarme
El jamás podrá tocarme
Porque mi escudo y mi protección
Es Jehová de los Ejércitos
Poderoso en batalla
II
Al despuntar un nuevo día
Mi musa en ti se inspira
Amado y eterno pastor
Porque tú eres el autor
De mis preciosas poesías
Las excelsas y gratas melodías
Que exaltan tu labor prodigiosa
De cuidar de forma grandiosa
A todas las ovejas del redil
Y de manera gentil
Buscas sin ningún descanso
Aquella que abandono tus brazos
Solo para probar un rato
Los placeres que le enseña el mundo
Atrayendo para su ser
Un mal proceder
Que la hundiera en el dolor
Porque las drogas y el alcohol
Sera el cruel detonador
Donde mitigara tus penas
III
Pero Jesucristo con su amor
Te busco de noche y de día
Y al encontrarte desvalida
Maltratada y muy herida
En sus brazos él te cargo
Tu herida con su bálsamo ha curado
Y para completar su excelsa labor
Con su sangre preciosa
Lavo todas tus vestiduras
Y hoy resplandecen de la blancura
Porque cuentas con la llenura
Que te da el Espíritu Santo
El consolador por excelencia
La más preciosa evidencia
Que el a tu lado siempre ha estado
Porque mi Dios a tu lado lo ha dejado
Para que guie y cuide tus pasos
Hasta que llegue el momento
De regresar de nuevo al cielo
Al lado del padre amado
ENEIDA JOSEFINA BRAVO REALZA
POETISA DE JESUCRISTO
EL BAÚL-VENEZUELA
30/12/2.018.
08:15 A.M