El nuevo año en sus albores
motiva los corazones,
creando las ilusiones,
de muy variados colores.
Se olvidan viejos dolores,
queriendo un año mejor,
guiados por ese tenor,
existe positivismo,
buscando con dinamismo,
ventura, salud y amor.
Ventura, Salud y amor,
son palabras mencionadas,
que deben ser amparadas
con actitud de fervor.
Los logros del jugador,
llegan con perseverancia,
no se admite la vagancia,
maná no cae del cielo,
con sudor se siembra el suelo,
para obtener abundancia.
Para obtener abundancia,
se buscan manos amigas,
para producir espigas,
que provean la ganancia.
La ayuda tiene importancia,
manos que dieron riqueza,
se compensan con nobleza,
esto es justicia social,
siendo este factor crucial,
para bajar la pobreza.
Para bajar la pobreza
Se requiere ser sensible
ayudar siempre es posible
aunque se tenga dureza.
El amor, sin duda empieza,
provocando un sentimiento
de piedad en un momento,
extendiendo diestra mano,
al más paupérrimo hermano,
inmerso en el sufrimiento.
Inmerso en el sufrimiento,
sin pan para la familia
pasa el hermano en vigilia,
es poderoso tormento.
Es peligroso el hambriento,
puede desviar su camino
porque le vale un comino;
es marginado social,
sale su instinto animal,
es predecible el destino.
Es predecible el destino,
¿Existirá la conciencia
o seguirá la tendencia?
¿El poder cambiará el tino
o continuará mezquino?
¿Habrá determinación
para llegar a la acción?
Se está en una encrucijada,
la actual es filosa espada.
¿Será este año la ocasión?