Mi literatura prohibida
Comienza mi lectura erótica abriendo de par en par su obra escrita, como el que separa sus piernas profanando el lado mas perverso de su literatura prohibida, esa que me inspira ser su asiduo lector de todos y cada uno de sus delirios febriles.
Así me somete con la fuerza de sus letras como un simple esclavo de su placer, para ser artífice de su imaginación que usted me brinda en su cuerpo todo lo que escribe en ellas.
Dentro de su cuerpo descubro la existencia del mío porque soy parte de usted, de su tiempo, de sus pensamientos, y de todos sus sueños.
Cada verso nuestro se convierte en el arrullo de palabras de amor incandescentes, entre dos poemas destinados a amarse.
Así divaga mi mente como una locura neurótica que me envuelve el pensamiento, compartiendo los detalles, las caricias, el amor, incluso las lagrimas cargadas de sentimientos.
El amor es algo que jamás pasa de moda y justamente hoy es nuestro.
Jordi Etresi