Mi alfiler.
Mi marea subcutánea:
tremolo enervante
contorno de un escalofrió.
Mi alfiler.
Sin salitre en esquinas,
pintado de pestañas,
a color color de sueño.
Mi alfiler.
Sentado con los ojos abiertos.
Atisbo de siluetas,
soledades e impaciencias.
Mi alfiler.
Punzando el pecho:
Daga/ dulce arma/ profundo.
Y una danza, avanza, avanza.
Mi alfiler.
Sostenido en un dedo,
fragilidad y no consuelo:
Convulsión de este suelo.
Mi alfiler:
Nocturno duende
de árbol en la vereda.
Duende de mis ramas.
Mi alfiler.
Estremecida sangre
sobre tus rieles de acero,
de infarto y de venas en celo.
Mi alfiler:
Atraviesa la noche, y la noche,
hasta un sueño descansado.
Luego me pincha el silencio.
Mi alfiler.
Mi brazo, mi voz,
mis ojos y mi espejo.
Mi extravío.
Mi alfiler:
Al filo.
Mi alfiler:
Tan adentro…