¿Dónde la senda, hallaré,
Que me lleve hasta tu lado?
Porque estoy enamorado
Y sin ti me moriré;
En tus brazos encontré
El cobijo más sagrado,
Aquel sueño tan buscado
Y que a tu lado alcancé;
Eres dueña de mi vida,
Toda inocencia y candor,
Esa mujer consentida
Que me libró del dolor,
Eterna llama encendida
Dueña de todo mi amor…