Nacho Rey

PARÍS AL DESNUDO (2º) JULIE BENZ

Dueña de tu rubia melena,

cayó sobre mí tu mancha vestida,

tu dulce rayo que se me volvió pena:

¡Oh, no podré gozar de tu imperial bienvenida!.

 

Tu piel blanca y tu trasero de gala,

canta tu imagen fugaz y halagadora

en mi mente apacible que me acorrala:

y es que me envenena tu femenina aurora.

 

Madre muerta en la nocturna bañera,

con sangre de virgen de rocío inocente: 

¡qué vacío para tu hijo joven sin quimera!.

 

Y yo sin tí, Venus Madre Serpiente,

que ya no te podré besar, oh bella extranjera,

pues soy sólo para ti, un violín indigente.

 

                                NACHO REY