No puedo despedirme, ni sentir ese adiós,
sé que estaré cerca, aunque lejos este de ella;
será mi camino largo el eco de su voz,
será la esencia de tu ser mi fuerza para seguir.
Mi lucero serás en mi soledad nocturna,
estaré de vuelta a mi destino,
sintiendo tu mirada detrás de mí,
anhelando mi regreso y decirte:
No puedo vivir sin ti.