Concierto que acaricia madrugadas
y el díscolo placer de sus primores,
inquieta presumido los rubores
de indóciles y ascetas escapadas.
Vagando tan discretas las miradas
de azares desflorando sus candores,
confiesan clandestinos, tentadores
revuelos de aventuras desveladas.
Libertas las gemelas esperanzas
en fugas celestinas de caricias,
rubrican hechiceras sus romanzas.
En tórrido concierto las ardicias
del loco suspirar de las andanzas,
musitan seducción en sus primicias.
II
Musitan seducción en sus primicias
umbrosos avatares revividos,
arrullan sus consuelos abstraídos
del canto cenital de las albricias.
Evaden el rencor de las codicias
que aclaman egoísmos desprendidos,
celosos los acordes reprimidos
y efímeros bergantes de malicias.
Concierto del crepúsculo cansado
y el mito cenital de su osadía
que intrépido fecunda enamorado.
En tanto su algazara en melodía
confiesa en el vergel alborozado:
la súbita eclosión de su porfía.
Aimée Granado Oreña ©
Gota de Rocío Azul
Cuba/Estados Unidos de América