No conozco los caminos insondables del Señor,
No sé hacia donde me llevara el norte de mi brújula,
No sé ni por que vengo o hacia donde creería que voy,
Solo sé que te pienso,
Y que por ti mi alma anda en duelo,
Sin el saludo fraterno del “buenos días amor”
Se que la ilusión es un tema de los poetas,
Y sé además que los sueños,
Son un escrito con tinta de Amor,
Sé que sus páginas son dibujos intensos,
Escritos en nubes con tinta azul.
Siento que el tiempo me cobra una deuda,
Sé que las horas no son mías, y menos prestadas,
Sé que no escribo, si no te llevo en mis alas,
Y sé que no siento, si no eres parte de mi Alma.
Soy un puñado de letras,
Y eres el estrujo de unos papeles,
Sé que en las líneas en que yo te escribo,
Dejo de llamarte por tu nombre viviente;
Sé lo que te debo…
Sé lo que me toca… seguir escribiendo sobre las nubes,
Con tinta oscura para inventar un firmamento.
No sé de donde viene mi barca,
O hacia donde apunta mi ruiseñor,
La brújula de mi norte es extraña,
Porque escribe sobre un papiro…
El nombre tu alma, cual título… es Amor.