Cada quien a sus mares y tifones;
el agua mata al igual que el fuego
y no por ello habría que temerle menos
Cada quien a la pieza que le fue concedida
y a la conciencia a la que arropa
Cada quien a su muerte y a su vida
que los idilios son ficticios
y es cruda la verdad
Ahogados y suicidas abundan
...y no por ello la tempestad se habrá de calmar
Las fuerzas son proporcionales
al ímpetu concedido;
el por qué los vasos de agua
se transforman en tormentas
Todo es mental y por ello todo es natural;
la marea, los tifones, el caos y la humanidad
Otra cosa muy distinta es la tendencia a exagerar
la tragedia con tal de hacer de ella un estandarte
A nadie le interesa si sufres más que otros,
pues sufrir ya es un sentimiento colectivo
Cada quien a su tormenta y cada quien a su tormento